28 nov 2011

EL PERREO: ¿SEXO CON ROPA?

Es el tema del momento, un estilo de baile sensual, generalmente movido, que puede llegar a ser agresivo en sus movimientos y en ocasiones en sus letras. Se trata de seducir a la pareja con movimientos insinuantes que imitan el acto sexual.

No es la primera vez que un baile escandaliza Lima: la lambada, el alcatraz, el tango…también son bailes sensuales, de contacto e insinuación con connotación sexual, también fueron censurados. El perreo puede ser utilizado como gancho por los distribuidores de drogas al menudeo. No se ha demostrado que exista una correlación entre el baile, consumo de alcohol, drogas y actividad sexual, sin embargo puede ser una forma de captar a menores para llevarlos a consumir drogas y realizar prácticas sexuales de riesgo en forma promiscua.

El consumo de alcohol y drogas afectan la capacidad de discernimiento; bajo estas circunstancias las personas realizan actividades que en situaciones normales no harían, pudiendo llegar a contraer infecciones de transmisión sexual o embarazos no deseados.

La solución no es prohibir el perreo, se ha intentado en varios países sin resultado alguno. Deben establecerse controles en las discotecas para evitar el ingreso de menores de edad, la venta de licor y drogas pero, por encima de todo esto, la prioridad es la Educación Sexual, la cual debe ser impartida, desde un inicio, por los padres y complementada por los Centros Educativos.

No puede ser que existiendo lineamientos para establecer Programas de Educación Sexual en las escuelas, aun no se hayan implementado. Ya es un tema de estado que debe ser abordado en forma abierta y directa. El temor de tocar temas comprometedores, como la sexualidad, hace que nadie quiera mojarse ni tomar decisiones sobre la materia.

Los profesores no se sienten preparados para abordar temas sexuales, los adolescentes perciben que los profesores no dominan el tema y los padres no quieren hablar ni que les hablen de sexualidad a sus hijos. Es como ponerse una venda en los ojos. Hay una doble moral que debe cambiarse y esto lo están exigiendo nuestros jóvenes aquí y ahora, no mañana ni pasado mañana.
Pedro Rondón Navas
Psicólogo- Sexólogo
pedrondonavas@gmail.com
http://sexologosonline.blogspot.com

14 nov 2011

PESAS VAGINALES Y BOLAS CHINAS

PESAS VAGINALES Y BOLAS CHINAS
Las pesas vaginales son conos de peso variable, que se introducen en la vagina gradualmente y de cuyo extremo cuelga un hilo delgado, generalmente de nylon, que permite extraerlas con facilidad. Su uso terapéutico es ampliamente recomendado para fortalecer el piso pélvico, incrementar la lubricación, fortalecer los músculos de las paredes vaginales, incontinencia urinaria o para prevenir prolapsos; una vez colocada en la vagina se puede permanecer de pie e incluso caminar apretando los músculos sin que se caiga el cono.
Las pesas vaginales se originaron a partir de las dificultades que presentaban algunas mujeres al ejercitar los músculos pubo coccígeos con las técnicas de Kegel, de las cuales hemos hablado anteriormente. Los médicos recomiendan utilizarlas durante 15 a 20 minutos una o dos veces al día. Una vez que la persona ha aprendido a contraer los músculos pubo coccígeos es recomendable que los contraiga sin tener la pesa introducida. Aprender a manejar estos músculos es altamente efectivo para incrementar el placer durante el coito.
Es recomendable visitar al ginecólogo regularmente y hablar sobre la conveniencia de utilizar las pesas, analizando las posibles causas del debilitamiento del piso pélvico y/o de los músculos pubo coccígeos.
Las bolas chinas son dos bolitas unidas entre sí con un hilo, las cuales se introducen en la vagina igual que las pesas vaginales e incluso tienen la misma función terapéutica pero son comercializadas en los Sex Shops como juguetes eróticos, sin embargo en algunos países se comercializan en farmacias. Durex elaboró un informe sobre sexualidad y los resultados demuestran el incremento del uso de juguetes sexuales, destacando significativamente las bolas chinas como el más utilizado por mujeres solas o con su pareja. Ginecólogos y sexólogos lo recomiendan por sus beneficios para la salud sexual y como elemento erótico: el mantenimiento del piso pélvico tonificado favorece la irrigación sanguínea y por tanto facilita la sensibilidad de las áreas implicadas en el logro del disfrute sexual y del orgasmo de la mujer. La higiene es muy importante cuando se usan las pesas y bolas chinas así como también la reposición de los implementos cada cierto tiempo.
Pedro Rondón Navas
Psicólogo- Sexólogo
pedrondonavas@gmail.com
http://sexologosonline.blogspot.com

LIMERANZA

Las personas van al matrimonio con expectativas sobre su pareja y sobre el matrimonio como institución. Estas expectativas están relacionadas con el comportamiento cotidiano: hábitos, higiene, relaciones familiares y lo que se espera del matrimonio en sí.
Personas inseguras ponen en manos de su pareja la responsabilidad de su vida: “si me dejas me muero”, “quiero que me cuides, me protejas, te encargues de mí”; “sin ti no soy nada”; son frases típicas de quien no ha asumido que vivir en pareja es libertad y autonomía, no dependencia ni manipulación. Cada uno debe mantener su individualidad, sin descuidar sus intereses personales. El tiempo que se dedique a la pareja, hijos, actividades comunes de la vida en pareja: compras, recreación, visitas familiares y a uno mismo, debe ser equitativamente distribuido.
Los acuerdos son tácitos y esperamos comportamientos de la pareja que jamás se han expresado. Al pasar el tiempo la fase de enamoramiento inicial y la pasión va decreciendo, las personas se muestran tal como son, lo que antes percibíamos como rasgos graciosos y peculiares se vuelven defectos y son perceptibles; muchas veces “inventamos” personas ideales en base a expectativas personales, exagerando cualidades y ocultando defectos en forma consciente. Este estado se llama “Limeranza”: enamoramiento subjetivo, irracional y obsesivo.
Sin embargo, también con el pasar los años se puede construir una relación afectiva más profunda, sobre todo cuando las personas que deciden vivir un proyecto común, no desaparecen como individuos. El respeto, tolerancia, disfrute de la sexualidad sana, paciencia, empatía, afecto y diálogo, son elementos que facilitan la convivencia.
Si las expectativas tácitas sobre la pareja y del matrimonio se expresaran abiertamente las probabilidades de duración serían mayores. La personalidad es dinámica y se pueden cambiar algunas cosas pero no se puede pretender transformar a la pareja en lo que uno quieren que sea, sin embargo pueden fijarse límites acerca de lo que uno espera de su pareja y a la vez escuchar lo que esa pareja espera de nosotros. Podríamos elaborar un contrato sobre expectativas y comportamientos deseados pero más importante es “darnos cuenta” de lo que implica la Limeranza.
Pedro Rondón Navas
Psicólogo- Sexólogo
pedrondonavas@gmail.com
http://sexologosonline.blogspot.com.