19 sept 2011

INEXPERIENCIA SEXUAL

Ante la primera experiencia sexual las personas elaboran expectativa que generalmente carecen de validez, entre ellas tenemos: “el desempeño sexual debe ser igual al de una competencia de alto rendimiento”. “El hombre debe ser quien lleve la iniciativa, la mujer no debe mostrar mucho interés porque si lo hace el varón pensara mal de ella”. “El tamaño del pene es muy importante para brindar satisfacción a la mujer”. “Si ella ha tenido experiencias previas va a compararme con su pareja anterior”. “El varón debe demostrar seguridad y habilidad en su desempeño aunque no tenga experiencia”.
Estos pensamientos y la falta de información sexual generan sensaciones de ansiedad y tensión que dificultan y entorpecen el desempeño sexual satisfactorio. Nadie nace sabiendo, menos en el aspecto sexual, porque son temas de los que no se habla.
La expresión de sentimientos y preocupaciones relacionadas con la inexperiencia suelen ser un excelente antídoto contra la ansiedad generada por esta situación. Las presiones recaen mas en el hombre que en la mujer. La falta de experiencia va ser superada con la práctica pero la información y la comunicación ayudan al desarrollo de habilidades para el desempeño sexual operativo y para el ejercicio de la sexualidad responsable, claves en el disfrute de esta primera experiencia. Si la experiencia no es del todo satisfactoria mejorara la próxima vez y no caben las “calificaciones” porque al acto sexual se debe ir relajado y sin expectativas de “rendimiento académico”
Las personas que reciben educación sexual en los centros educativos retardan el inicio de la actividad sexual porque están conscientes de que así como hay disfrute también hay riesgos y toman decisiones racionales y responsables. La educación sexual no solo debe contemplar aspectos biológicos, debe tomar en cuenta valores, autoestima, asertividad y comportamientos sexuales. Cubriendo todas estas áreas es muy probable que la primera experiencia sea llevada a cabo con responsabilidad con la persona indicada y en el momento adecuado.
La sexualidad no debe ser tomada como broma ni en doble sentido. Hablar de sexualidad es hablar científicamente y sin tabúes, evitando mensajes confusos que le resten seriedad al tema.

Pedro Rondón Navas
Psicólogo- Sexólogo
pedrondonavas@gmail.com
http://www.sexologicas.com/