26 oct 2010

EL ANHELO DE MUCHOS: CONTROLAR LA EYACULACION

Si alguna vez percibió todas las sensaciones de un orgasmo y no llego a eyacular no tiene por qué preocuparse, al contrario, es un privilegio que pocos hombres han experimentado (salvo que sea una patología); tendemos a confundir ambos eventos que ocurren casi simultáneamente, sin entender que son independientes y no exploramos la posibilidad de experimentarlos separadamente.

El orgasmo del varón es un proceso involuntario que aparece tras haber superado las fases de excitación y meseta. Durante el orgasmo se incrementa la presión sanguínea, se acelera el ritmo cardiaco y la respiración se hace más intensa, los testículos se elevan y pegan al cuerpo, se produce una gran tensión muscular y contracciones en las zonas genital y anal. Se acerca el momento de la inminencia eyaculatoria, donde el proceso se vuelve irreversible, El tracto urinario se cierra y el semen es expulsado a través del pene. La eyaculación es la expulsión del semen a través del pene mientras que el orgasmo es la máxima intensidad de placer que experimenta el varón, en este caso, durante el ciclo sexual.

Usted no necesita pensar en problemas de trabajo, formulas matemáticas o velorios para retardar la eyaculación, esto más bien puede disminuir las sensaciones de placer y hasta hacerle perder la erección. Para eso existen técnicas de control: por ejemplo, durante la penetración puede retirar el pene de la vagina y ejercer presión manual sobre el glande cuando aparezca la inminencia eyaculatoria. Dado que la forma de facilitar el orgasmo es incrementando la presión del pene realizando empujones más fuertes y profundos hasta llegar a eyacular puede disminuir el ritmo voluntariamente, retirar el pene o cambiar de posición para demorarla. Durante la masturbación el movimiento de la mano se hace más vigoroso cuando se va a llegar al orgasmo, puede variar el ritmo para retrasar la eyaculación.

Llegar a percibir el orgasmo y eyaculación como procesos diferentes es la clave del multiorgasmo, existe la opción ocasional de tener orgasmos sin eyaculación, deseo de la mayoría de varones y esto se puede lograr a través de un entrenamiento apropiado y con ayuda de su pareja.